lunes, 9 de marzo de 2009

LO QUE PARECE DIFÍCIL... PUEDE HACERSE FÁCIL


-"El Aprendiz de Arquero"


El viento soplaba fuerte y frío, creando pequeños remolinos de hojas a la par que
erizaba la piel del joven muchacho esparciendo el olor de su esfuerzo muscular al tensar el enorme arco.El cielo gris tampoco ayudaba mucho.

La bella entrenadora Lin Piu, miró sonriente al muchacho, sus negros cabellos estaban recogidos en una hermosa tiara dorada mientras que unos amplios ropajes parecían bailar ante la silenciosa música que el travieso viento tocaba contra sus delicadas líneas femeninas.

-Lin Piu, es obvio, creo yo -contestó el aprendiz, feliz de poder ser útil al marcar todos
los defectos de la pista de entrenamiento, y poder ayudar así a solucionarlos y facilitar
el adiestramiento de todos los arqueros que fueran detrás de él.


Quien construyó esto no se dio cuenta de que este cerro no es precisamente el mejor
lugar para una pista de entrenamiento de arqueros. Aquí el viento es irregular y
caprichoso, te despista de tu objetivo. Además hay poca luz, con lo que el blanco se ve
mal.

El movimiento de las ramas distrae mucho. Creo que si alguien los podara, sería todo
mucho mas sencillo.


Ah! -agregó suspirando-y la diana no esta recta del todo, sino que esta un poco torcida a la derecha, eso hace que una flecha que le diese pudiera fallar el blanco. Si alguien lo corrigiese, entonces si podría dar en la diana. Si no es imposible!!
A quien se le ocurrió poner esta pista aquí? Sin duda no sabia mucho de arquería !!


Lin Piu rió dulcemente, su risa era como una hermosa melodía al son de la cual bailaba todo su hermoso cuerpo. Tao Tseng habría jurado ver danzar el espíritu de la bella arquero debajo de los amplios pliegues de su blanco kimono.


-De verdad crees que quien puso esto aquí no sabia nada de Arquería ? -preguntó casi
como para si misma-. Pues quizás tengas algo de razón, pero sin duda sabia mucho del corazón humano.


Y acto seguido Lin Piu arrebató el gran arco de las manos del sorprendido joven y
tomando una de las flechas clavadas en el suelo delante de él, la tensó y apuntó con una rapidez y destreza sin igual.


La mujer solo apuntó un momento, pero Tao Tseng jamás olvidaría la expresión de esos ojos, normalmente vivarachos, seductores, y casi traviesos. Ahora estaban
impresionantes, parecían absorber la esencia de todo lo que les rodeaba... a la par que se centraban en un solo y único punto.


Todo tardó menos de lo que Tao Tseng podía usar en tomar aire, y entonces la flecha
ya estaba ahí, perfecta, precisa, en el justo centro de su diana, tal y como si siempre hubiera pertenecido a ese lugar.

Tao Tseng se quedó maravillado con -literalmente-la boca abierta, jamás habría
esperado ver tanta destreza ni una sabiduría semejante en una mujer tan joven y
hermosa.

Todo lo que yo he dicho son problemas gravísimos y reales que existen!

Acaso no sabes mirar a tu alrededor y verlos? -dijo ofendido y con su amor propio
tocado.

Tú no me has mencionado que las flechas están mal equilibradas, ni que el arco es
demasiado duro pues ya es viejo y esta gastado.
Tampoco has visto que el blanco esta más abajo que nosotros, lo que siempre es
incómodo, ni que las hojas que revolotean con el viento pasan frecuentemente por
delante de nosotros y la diana entorpeciendo la visión... ni unas cuantas cositas
mas que nos hacen... como era? -y tras fingir ponerse seria para recordar con precisión, agregó: -Que hacen "imposible" dar en el Blanco.


Tao Tseng miraba fijamente la flecha, perfectamente clavada en su diana, debatiéndose internamente entre su joven orgullo masculino herido, y su admiración e increíbles ansias de aprender.

Finalmente sus ansias de mejora pudieron sobre el rencor y repleto de una total
admiración y aprecio, aceptó la lección de humildad y se preparó para aprender lo
verdaderamente importante de la experiencia.

La hermosa mujer, viendo la total sinceridad en los ojos del joven, respondió en el
mismo tono franco que él.


-Todos... o casi todos -sonrió-aunque siempre hay algún aprendiz que me indica uno
nuevo -su risa era como el dulce cantar de una paloma-no se como son capaces de
dispersarse tanto, de esperar tanto!

-Está todo relacionado -explicó ella-cuando la gente espera que las cosas sean de cierta forma, y no lo son, dispersa su concentración y sus energías en centrar inútilmente sus pensamientos en todos los fallos que no le gustan, y el desagrado que le crean, esa dispersión de sus recursos internos, les hace fracasar.


Tao Tseng tragó saliva, aún no lo entendía del todo, pero aquello había tocado una fibra sensible dentro de su ser.


-No entiendo bien lo que me dices -farfullo finalmente Tao Tseng-Qué quiere decir
"Esperar"?

Cómo podría explicarlo para que lo entendiera lo mejor posible?. Lo que le estaba
explicando llegaba justo hasta el fondo de las más importantes hebras de la naturaleza
humana... Cómo poder llegar hasta ahí sin chocar con los muros de los prejuicios y
orgullo que sin duda habitaban en el joven igual que habitan en cada ser humano que
respira y camina ?


-Quién decide si una persona Triunfa o no ? -Preguntó finalmente la entrenadora
dando un sabio rodeo para poder traer la más intensa luz de la comprensión en la mente y el corazón del joven.


Tao Tseng dudó durante unos momentos, su mente le decía varias cosas contradictorias, pero su naturaleza era de arquero, así que acalló sus pensamientos y se centró totalmente en escuchar a su corazón.

Lin Piu aplaudió literalmente la sabiduría y el acierto del joven, pocos eran tan sabios e inteligentes como para dar una respuesta tan precisa y verdadera!


-Así es! -Dijo tan contenta que le espetó un beso de recompensa en la mejilla del joven y, posando su brazo como si fuera un camarada de batalla y agregó -Eres muy
inteligente e intuitivo Tao Tseng, pues has sabido ver y aceptar la mayor de las
verdades de esta vida, que solo uno mismo decide si triunfa o no.

-Hagamos un juego, mi joven amigo, vamos a hablar rápido, yo te hago una pregunta y tu me respondes rápido. De acuerdo?

-Yo mismo -contestó, aunque, en este caso le tembló un poco la voz. No es que dudara de la respuesta, Tao Tseng sabía que esa ERA la respuesta correcta y verdadera, lo que pasaba es que realmente le daba un poco de miedo la importancia que tal significado acarreaba sobre su vida.

-Yo mismo -contestó el Joven arquero alargando cada una de las palabras, sabía que
estaba diciendo lo correcto, pero no podía evitar sentirse como si hubiera caído en una
trampa.


La mujer sabia mucho más sobre el corazón humano de lo que nadie habría considerado "cómodo" estando en su presencia, así que el aprendiz no pudo evitar temblar cuando Lin Piu sencillamente le espeto:


-No te sientes ahora mismo como si hubieras caído en una trampa? -Preguntó
sonriente.

Tao Tseng encontró ahora algo más poderoso en su interior que esa sensación que
parecía fascinarle y revolverle el estómago a la vez, y fue la fuerte necesidad de
aprendizaje que siempre le dominaba.


-La Trampa de la Vida -repitió el-Fascinante... Que quieres decir exactamente con
eso?


-Es más sencillo de lo que parece -dijo ella -de pequeños se nos explica que la vida es
dura, y es cierto, no sabes cuanto lo es! -explicó ella seria y feliz al mismo tiempo-
La vida es inmensamente dura porque nos ha dado a todos y cada uno de nosotros la mayor de las cargas, la carga de la "Responsabilidad de Nuestras Propias Vidas".

-Puede ser -dijo ella-y si no es eso, si algo muy parecido y quizás hasta más poderoso
-el joven escuchaba extasiado-.


-Cuando a la gente le dicen que la vida es dura, se echan a temblar y a pensar que las
mayores desgracias se abatirán sobre ellos -su hermosa cara tenia una peculiar sonrisa-no se dan cuenta de que la dureza de la vida es algo aun mayor que todo eso, es la Responsabilidad.


El saber dentro nuestro que en realidad, y después de apartar todas las telarañas de
excusas que queramos poner para no poder ver lo que es cierto, solo existe una verdad, y es...

Que cada Persona, es la única que decide si Triunfa... o no.


Tao Tseng estaba entendiendo más de lo que quizás desearía, así que cerró los ojos para poder asumir mejor la enorme carga sobre sus hombros y preguntó:


-Quieres decir que el éxito en la vida es una cuestión de Decisión y Responsabilidad ?


-Así es, mi pequeño amigo. Fíjate en el tamaño de esta verdad y comprenderás por
qué, en su inmensidad, aun las más grandes culturas sólo pudieron aceptar y
comprender pequeñas partes de su totalidad.
Quizás pueda parecer que esas pequeñas partes se contradicen, pero igual que una
pata de un Elefante es una parte, de la misma forma que lo es su trompa o su cola,
todas son parte de la figura total, y no podemos juzgar la Gran Verdad sólo por una de las partes, solo por la Totalidad de la misma.

Cualquier cosa!!

Pero no nos distraigamos de lo que nos interesa, la cuestión es que el único decide si
acertaras o no en la diana... Quién es?

-Así es. -y agregó-así pues, dado que solo tú decides si aciertas o no aciertas en la
diana, eso quiere decir que Las Circunstancias son Irrelevantes! Te das cuenta de eso?

-Pero eso también quiere decir que yo fracasé, no le di a la diana, porque así lo
decidí y no por el viento, las sombras o las flechas mal construidas -dijo torciendo la
cara en una mueca de disgusto.

Tao Tseng no lo sabía, no dudaba ahora que había fracasado porque así lo había
decidido, cierto es que con todo su ser deseaba echarle la culpa a otra cosa, pero sobre
todo era un arquero de Honor, y eso quería decir que reconocía sus propios fallos. Así
que intentó descubrir por qué.

El Problema no está en tus pensamientos conscientes, sino en esa parte de tu mente quetrabaja sin que tu seas consciente de que lo hace, como cuando respiras, haces que tu corazón lata, o mueves una mano rápidamente por reflejo. -Hizo una pausa para que el aprendiz entendiera sobre que estaba hablando y continuo-
La cuestión es que tú tienes una costumbre que todos tenemos, y es la de hacer Juicios y Prejuicios. Los Prejuicios son opiniones sobre lo que deberían ser las cosas antes de tener datos suficientes para tomar una opinión bien fundamentada.


Pues bien, cuando tú entraste en la zona de prácticas, te habías creado en tu mente una idea de como seria todo. Tú "esperabas" que todo fuese de cierta manera... pero resultóque las cosas no eran tal y como esperabas.

Así que acto seguido te pusiste a identificar como "malo" todo lo que no coincidía con
tu opinión de como deberían ser las cosas y lo marcabas mentalmente como un "error"que debería ser corregido.
Por qué?... Sencillamente porque tú querías que las cosas fueran tal y como tú te las
imaginabas, como esperabas que fueran.

Así que ese descontento que tenias dentro de ti identificó un montón de errores y
emitió un Juicio, un Juicio que quizás no fuiste consciente de ello más que con un
simple sentimiento interno, un pensamiento tan rápido que no puedes identificar con
palabras, sino con un movimiento rápido de la mente, una sensación de disgusto, quizáscomo un malestar escondido en un músculo, fuera como fuera, ese Juicio era "EstaArquería está mal, nadie puede aprender aquí"

Tú, al "esperar" que las cosas fueran de una manera, y al ver que eran de otra, te
NEGASTE A ACEPTAR como son en realidad.
Esa negativa provocó ese Juicio en tu Interior. Y ese Juicio creo una DECISIÓN
interna. La Decisión de Fracasar, de errar el tiro, para demostrarte internamente quetu Juicio era el correcto, autoafianzarte en tu interior de esta manera y quizás hastallamar la atención sobre los demás para que corrigieran todos los errores.

Te das cuenta ahora de que todo sucedió en tu interior tal y como te digo?

Tao Tseng asintió avergonzado.

Pero no te preocupes mi amigo, esto ocurre en el interior de todas las personas y
normalmente este proceso es el causante de todos los fracasos, simplemente la
persona se convence de que las situaciones que le rodean sólo le pueden conducir al
fracaso, y entonces internamente decide que va ha Fracasar.
Después, hace inconscientemente todo lo que está en su mano para hacerse fracasar a
si misma, pues -sonrió-necesita saber que tenia razón.


-En cierta ocasión -comentó el joven tímidamente-escuché a dos Maestros arqueros
hablando de términos parecidos... y lo llamaron... Cómo era? Ah!, si! ENTUSIASMO!

-Esa es la excusa mas vieja de los fracasados mi joven amigo -al verlo ofendido
añadió-perdona, no quería ofenderte, sin duda tú tienes talento de arquero, pero
alguien en el pasado te metió esa idea, digna de un fracasado, en tu hermosa cabecita.
En seguida comprenderás lo que quiero decirte.

-De acuerdo pues, ahora estás ESPERANDO, así que acompáñame -Y rápidamente le
condujo hasta el almacén de los arcos, una pequeña caseta de madera bien cuidada, una vez dentro cerró todas las ventanas con sus postigos y atrancó la puerta creando una oscuridad casi absoluta. -Ahora Tao Tseng, enciende esta vela.


El muchacho así lo hizo, aunque no fue fácil en la oscuridad. En cuanto pudo
encenderla, comprendió lo que la mujer había querido expresarle.

Ahora imagínate que estás en tu camino de la "vida" y que decides encender esta vela.
Bien, ahora tienes una luz que te puede iluminar el camino. Si usas esa luz, podrás
llegar al final de tu camino con éxito. Pero... que ocurriría si te fijaras en las
Sombras? Que verías?

Tao Tseng estuvo en silencio durante mas de diez minutos dejando que tamaña
enseñanza penetrara hasta en lo mas profundo de su mente.

-No amigo mío -dijo Lin Piu maternal-son sólo personas que no han tomado la
decisión de controlar sus vidas.
Pero esa también es una decisión, la decisión de que otros controlen tu vida, y eso es
algo que suele conducir al fracaso, pues... A dónde puede conducir la
irresponsabilidad?


El éxito no llega por casualidad, hay que decidir alcanzarlo y aplicar esa decisión con nuestro trabajo para triunfar.


Tao Tseng estaba ansioso por saber mas sobre este tema, pues sentía que era una
revelación suprema para él, sus intereses y su vida. Pero la información y la revelación
estaba siendo tan enorme, que decidió guardar silencio durante casi cuarenta minutos
para dejar que sus hombros se adaptaran a la nueva carga que portaban, una que siempre habían llevado pero que solo ahora reconocían como suya.


No hay comentarios:

Publicar un comentario